El pequeño municipio leonés de Cistierna estrena su condición como meta, aunque ya ha sido protagonista en otras dos ocasiones en la Vuelta a España. Ejerció como salida de dos jornadas montañosas con aroma asturiano en las ediciones de 2016 y 2018. En la primera, fue David de la Cruz quien consiguió la que a día de hoy sigue siendo su única victoria en una gran vuelta en el Alto del Naranco. Por su parte, Simon Yates recuperó el maillot rojo en Les Praeres, que también será final en la novena jornada de esta edición.
Una etapa con sabor a escapada que partirá desde Camargo, una salida inédita y que este año cuenta con la particularidad de ser, al mismo tiempo, inicio de la tercera jornada de la Ceratizit Challenge by La Vuelta el próximo 9 de septiembre.
Recorrido de la 7ª etapa: Camargo - Cistierna (190,1 km)
El inicio de la séptima etapa desde Camargo, una localidad próxima a Santander, será marcadamente sinuoso. En los primeros cien kilómetros los ciclistas recorren Cantabria de este a oeste atravesando poblaciones como Torrelavega, lugar de nacimiento del tres veces Campeón del Mundo Oscar Freire. A través de este terreno quebrado, que comenzará a limar las fuerzas en una jornada superior a los 190 kilómetros y servirá para formalizar la fuga, la carrera se dirige hacia el Puerto de San Glorio, que une las provincias de Cantabria y León.
Relacionado – Recorrido de la Vuelta a España 2022: análisis, perfiles y etapas
Relacionado – Carlos Rodríguez: "La intención es aspirar a las grandes vueltas en los próximos años"
Esta ascensión, perteneciente a la Cordillera Cantábrica, cuenta con más de 22 kilómetros desde La Vega de Liébana hasta la cima y se encuentra en el ecuador de la etapa. Aunque presenta una media cercana al 5,5%, lo cierto es que los seis kilómetros iniciales relativamente suaves en torno al 3%-4% camuflan porcentajes que durante gran parte de la subida se mantienen constantes por encima del 7%. Un puerto de entidad que, a pesar de coronarse a 65 kilómetros para la meta, será suficiente para descartar a los velocistas.
Tras un breve descenso, la carrera se adentra en la Meseta leonesa. Toda la parte final, salvo una pequeña zona antes de llegar al esprint intermedio de Las Salas, será predominantemente llana. Y, además, con una ligera tendencia descendente camino de Cistierna que podría provocar que la última hora de carrera fuera muy veloz. En caso de que los esprinters superaran el puerto relativamente cerca del pelotón, se antoja complicado que puedan echarle un pulso a la escapada.
Favoritos
El perfil invita a pensar en que los ciclistas con alma de caza etapas tendrán una oportunidad de pelear por el triunfo de etapa. La naturaleza de la jornada, con un puerto exigente que excluye de la ecuación a los velocistas y su emplazamiento previa a las etapas asturianas, presenta los ingredientes necesarios para contemplar un desenlace interesante entre los infiltrados en la escapada. Una aventura en solitario desde San Glorio o un ataque en la pequeña zona sinuosa previa al esprint intermedio podrían ser dos puntos para tratar de desembarazarse del resto de integrantes de la fuga, o al menos seleccionar el grupo.
Se trata de una jornada con varias alternativas y diferentes estilos de ciclistas con opciones de alzar los brazos, aunque aquellos con capacidad para superar los puertos tendidos y rodadores parecen los mejor situados. Es por ello que corredores como Thomas de Gendt (Lotto-Soudal), Andrea Vendrame (AG2R-Citroën), Fred Wright ( Bahrain-Victorious), Jake Steward o Quentin Pacher (Groupama-FDJ), Nelson Oliveira (Movistar Team), Remi Cavagna (Quick Step-Alpha Vinyl), Daryl Impey (Israel-Premier Tech), Pau Miquel o Kiko Galván (Kern-Pharma) o Xabier Mikel Azparren (Euskaltel-Euskadi) podrían ser protagonistas.
Imagen de cabecera: Vuelta a España / Cxcling