El británico Geraint Thomas se caracteriza por ser siempre realista y cristalino en sus declaraciones, y fue sincero al reconocer que 2024 o 2025 será su última temporada como ciclista profesional. A pesar de ello, en lugar de asumir un papel secundario menos exigente, se ha esforzado para tratar de extraer su máximo potencial y buscar nuevos retos. En el Tour de 2022 fue el mejor de los mortales y en el Giro d'Italia de este año rozó la maglia rosa hasta la extraordinaria contrarreloj de Primož Roglič en el Monte Lussari. Pero también se ha encargado de vivir nuevas aventuras, como la Vuelta a Polonia, su segunda participación en la contrarreloj de los Campeonatos del Mundo y a final de temporada encarará su más que posible debut en Il Lombardía, el único Monumento que nunca ha corrido.
La Vuelta a España supone otra de esas experiencias relativamente inexploradas. Aunque Thomas ya corrió la ronda española en 2015, un recuerdo que describe como "horrible", lo hizo en el inicio de su floreciente carrera como vueltómano. Horrible porque con el calendario en la mano tal vez no fue aconsejable añadir La Vuelta a una temporada que comenzó en el Tour Down Under en enero, apenas se detuvo en las clásicas de primavera y continuó durante el Tour de Francia como gregario de lujo de Chris Froome. Aquel año fue, de hecho, la única vez que Thomas ha completado dos Grandes Vueltas en una misma temporada.
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En el Giro 2023, Geraint Thomas vistió la maglia rosa durante ocho días (Fotografía: Zac Williams / SW Pix)
Desde entonces, la Vuelta no ha estado en los planes del ciclista galés, centrando sus objetivos en el Giro d’Italia o el Tour de Francia. Las características subidas constantes y pendientes desorbitadas de la Vuelta son, por un tanto, un territorio casi desconocido para Thomas como aspirante a la general. En la rueda de prensa previa al inicio de la carrera, el ciclista de INEOS Grenadiers explicó que está "un poco más preparado esta vez" en comparación con su única participación, pero admite que será una carrera "dura" en varios frentes: el recorrido, la competición y el intento de llegar dos veces a la máxima forma en una temporada. “Ha sido extraño intentar buscar dos picos", comentó al mismo tiempo que confirmaba con su habitual discreción que se siente "bien" de cara a la contrarreloj por equipos inaugural.
Pero no sólo el exigente entrenamiento ha sido una carga extra esta temporada. Por primera vez ha tenido que pasar un largo periodo lejos de su mujer y su hijo para entrenar en altitud a mitad delaño, algo que Thomas describe como "empezar la temporada de nuevo, pero en junio o julio". Aun así, la decisión de asumir un calendario más aventurero y saber que su carrera terminará pronto hace que sea, según sus propias palabras, bastante fácil de comprometerse. "Tengo el resto de mi vida para relajarme y beber cócteles", añadió.
Geraint Thomas se muestra feliz con la oportunidad de liderar otra gran vuelta para el conjunto INEOS. No hay muchos corredores de treinta y siete años en el pelotón que puedan ser los jefes de filas en el Giro y en la Vuelta, pero la notable regularidad del galés —y quizás el prolongado periodo de transición del equipo— todavía no ha sido desbancada de forma definitiva por una joven promesa. Especialmente, tras la grave lesión de Egan Bernal. Y aunque INEOS aún no ha anunciado el fichaje de ningún gran aspirante a las generales para 2024, ni siquiera la renovación de Carlos Rodríguez, sí ha permitido que abandonen sus filas corredores de la talla de Tao Geoghegan Hart, Pavel Sivakov y Ben Tulett. Una situación que Thomas califica de "gran vergüenza".
A pesar de todo, Thomas afirmó que aunque le "encantaría volver al Tour el año que viene”, no sabe si lo hará como líder del equipo. Pero se encargó de recordar que antes de mirar demasiado al futuro, primero se trata de pasar "estas tres semanas y luego tomar unas copas", la última parte presumiblemente dependerá de si la ronda española acaba siendo un éxito o no.
En la Vuelta, Thomas deberá intentar auparse a lo más alto del podio entre una jauría de jóvenes y talentosos ciclistas. Tan solo Primož Roglič buscando su cuarto triunfo en la ronda española, que podría proporcionarle un incentivo y una motivación extra al galés tras la contundente derrota en el Giro, supera los treinta años entre los favoritos. El compañero del esloveno, Jonas Vingegaard, encabeza esa juventud experimentada. El danés, al igual que Thomas, se aventura a doblar grandes vueltas por primera vez en su carrera después de cosechar su segunda victoria consecutiva en el Tour de Francia. La lista de aspirantes la completan Enric Mas (Movistar Team), Alekasandr Vlasov (BORA-Hansgrohe), la dupla del UAE Team Emirates, Juan Ayuso, tercero en la Vuelta 2022 con diecinueve años, y João Almeida y, por supuesto, la figura de Remco Evenepoel (Soudal-Quick Step).
El ciclista belga es el actual defensor del título de La Vuelta. Es evidente que entre Thomas y Evenepoel hay sintonía y se tienen respeto profesional, ya que el belga se ganó el apodo afable de "pequeño bastardo" gracias al podcast Watts Occuring de Thomas y Luke Rowe, en el que Evenepoel apareció recientemente. También hubo mensajes compartidos entre ambos cuando Thomas heredó la maglia rosa del belga tras abandonar como consecuencia del Covid-19. Aunque para el británico el ex campeón del mundo de fondo en carretera sigue siendo "uno de los favoritos para esta Vuelta”, sus puntos fuertes son "más adecuados para carreras de un día y esfuerzos momentáneos”. Esta afirmación deja entrever que el dúo que forman Roglič y Vingegaard parten con ventaja para Thomas.
Geraint Thomas en la presentación de equipos de la Vuelta 2023 (Fotografía: Charly López / Unipublic)
Incluso el propio Evenepoel parece estar de acuerdo con esta opinión, pues en la rueda de prensa previa a la carrera declaró que esperaba "correr un poco más a la defensiva y que fueran otros equipos lo que asumieran toda la presión y la carga de trabajo sobre sus hombros". Sin embargo, Thomas no considera que Evenepoel y Soudal-Quick Step sean capaces de pasar desapercibidos, y sugiere que "el peso de la carrera debería recaer en parte sobre ellos, al igual que sobre Jumbo".
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Independientemente de quién sea el encargado de controlar la carrera, una posibilidad también para el Ineos Grenadiers, no hay duda de que Geraint Thomas está motivado para disfrutar y absorber cada experiencia de sus últimos años como ciclista profesional. Ante la que podría ser la lista de contrincantes más exigente a la que se haya enfrentado nunca, el galés encuentra especial motivación en ese reto. "Eso es lo que te motiva. Cuanto más grande es el desafío, más ganas tienes de afrontarlo".
Imagen de cabecera: Zac Williams / SWPix
